Paco Poza

Paco Poza

Paco Poza, natural de Baeza (Jaén), es una de esas personas que se han hecho a sí mismas y, utilizando el vocabulario portuario, son multipropósito.

Antes de llegar a Sevitrade nuestro protagonista estuvo 22 años trabajando en el mundo de la hostelería barcelonesa. Con la celebración de la Exposición Universal de Sevilla tuvo la oportunidad de volver a tierras andaluzas, estando destinado al pabellón de España, en el cual atendió a innumerables jefes de estado y autoridades. En los siguientes ocho años seguiría vinculado a la restauración como camarero, segundo y primer metre. Tres décadas en dicho mundo que le sirvieron para mucho, pero en el 2000 tuvo que reinventarse.

En dicho año casualmente conoció Sevitrade por un amigo, y fue contratado como temporal en nuestro centro logístico del polígono La Isla durante una campaña de envasado de fertilizante. Allí se pasó un lustro, que luego pasó en igual número de años a guarda de noche en la Terminal Portuaria de la Esclusa.

Desde 2010 hasta hace solo unas semanas, que merecidamente se ha jubilado, Paco Poza ha estado ligado a las operaciones de líquidos cuando los barcos o camiones lo demandaran, mientras que a tareas de mantenimiento, jardinería o limpieza de las instalaciones cuando había menos carga de trabajo.

De entre sus recuerdos de la empresa, recuerda a un antiguo pastor alemán que le acompañaba en las noches de vigilancia y que, desde el propio cantil del muelle, se lanzaba al agua con la esperanza de capturar algún pez. Reconoce que para él el cambio de sector, de la hostelería al portuario-logístico, supuso un duro cambio, tanto laboral como psicológico, pero se sincera admitiendo que el reto que ello supuso le motivó, y supo adaptarse bien.

A lo largo de estos años Paco Poza se ha ganado el cariño y respeto de todos/as sus compañeros/as, desde el director general hasta el peón de muelle. Siempre ha ayudado en todo aquello que podía, especialmente en lo relacionado con la celebración de eventos, como en el Propeller Club Sevilla.

Para terminar, nuestro recién jubilado protagonista piensa que durante estos 22 años la dirección se ha portado muy bien con él, ha hecho las cosas lo mejor que ha podido, y le alegra terminar quedando bien con la empresa.

Gracias a ti Paco, por todos estos años comprometido con Sevitrade.

 



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